A finales del pasado mes de enero se publicó un estudio en la revista Science Advances donde explicaban como «La inhibición de la síntesis de esfingolípidos de novo contrarresta la distrofia muscular». Los investigadores demostraron como la inhibición farmacológica de la síntesis de esfingolípidos por miriocina en ratones mdx, modelo de DMD, mejoró la pérdida de la función muscular al mismo tiempo que redujo la inflamación, mejoró la homeostasis del Ca2+, previno la fibrosis del músculo esquelético, el corazón y el diafragma, y restableció el equilibrio entre los macrófagos M1 y M2.
Pero, ¿qué son los esfingolípidos? Se sabe poco sobre el papel de los esfingolípidos en la DMD, pero se conoce que son un tipo de molécula grasa bioactiva involucrada en procesos biológicos relacionados con la DMD. Estos procesos son: muerte celular, estructura de la membrana celular, inflamación, cicatrización o fibrosis.
El equipo de investigadores encontró inicialmente, que los niveles de enzimas involucradas en la producción de esfingolípidos eran significativamente más altos en muestras musculares de personas con DMD que en muestras de individuos sanos. Los análisis de muestras de músculos de pacientes con DMD mostraron niveles más altos de lo normal de estas enzimas que además, estaban presentes antes del inicio de los síntomas, e iban aumentando. Esto fue lo que sugirió que la vía de producción de esfingolípidos está relacionada con la gravedad de la DMD.
Con todos estos datos, los investigadores evaluaron si la supresión de la vía de producción de esfingolípidos podría disminuir los síntomas de DMD y restaurar la función muscular en el modelo de ratón. Para ello, los trataron con miriocina, un supresor de la enzima limitante de la vía de producción de esfingolípidos, y se vio una reducción de los niveles de esfingolípidos además de evitar, en parte, la pérdida de función muscular relacionada con la DMD. Observandose mejoras funcionales en la coordinación, fuerza y resistencia de los animales, cercanas a los niveles observados en ratones sanos.
La reducción de la producción de esfingolípidos también restableció el equilibrio de calcio en las células musculares y contrarrestó la ruptura de la membrana de las células musculares asociada con la enfermedad, la inflamación muscular y la fibrosis del músculo esquelético, el corazón y el diafragma.
Los beneficios de suprimir la producción de esfingolípidos con miriocina en estos ratones fueron similares, si no superiores, a los del tratamiento con glucocorticoides. Los investigadores constataron como una combinación de miriocina y glucocorticoides a menudo resultó en mayores beneficios que los observados con los corticosteroides. Se necesitan estudios futuros para evaluar mejor el uso potencial de los esfingolípidos como biomarcadores de DMD, y para desentrañar los mecanismos que vinculan la producción de esfingolípidos y estas afecciones.